
Pues resulta que ayer hizo la comunión una niña muy especial: nuestra amiga Irene.

Para un día inolvidable, su madre nos encargó algunas pulseras con las que obsequiar a sus invitadas.

Y así de monas quedaron, presentadas en una cestita adornada con lazos y flores que, al igual que el fondo del dibujo, era del color que Irene quiso.

Por cierto, que nos ha dicho un pajarito que tuvieron mucho éxito.
Muy buena idea, seguro que los invitados quedaron muy satisfechos.
ResponderEliminarNo conocía las cosas que hacían están muy buenas! felicitaciones y que lindas que quedaron las pulseras!
ResponderEliminarbesos